Especialmente para los comercios de ropa, accesorios y deportes, esta idea es perfecta para un bodegón. Se trata de exponer los elementos como podrías verlos puestos en la vida real, cómo si su dueño fuera aparecer en cualquier momento. Se ve muy claramente en la foto: han colocado una toalla extendida y otra doblada, dos pares de sandalias, cada una mirando en una dirección, un bolso y dos pares de gafas. Una imagen muy familiar que nos recuerda a un día en la piscina o en la playa, cómo si dos amigas se hubieran ido a dar un paseo y estuvieran a punto de volver. Este tipo de escaparates son muy interesantes ya que pueden tocar el lado emocional del cliente, haciéndole recordar situaciones positivas. (España)
Leave a Reply